Entre
todo lo malo que a diario ocurre en este país hay una buena noticia,
por partida doble, las victorias que han acompañado a nuestra oncena
futbolística, primero contra Bolivia (4-1), y el lunes contra
Trinidad y Tobago (2-0)... Trinidad y Tobago, ¿será por lo que los
mala gente dicen que es alegría de tísico? Con ese tonito de “tanto
escándalo por ganarle a Trinidad y Tobago”. ¿Qué, eran mochos?
No me lo pareció. Fuera de ganarle a dos naciones que no son
realmente amigas de Venezuela, queda eso: se ganó. Y miren que soy
de los que odia eso de Vinotinto, me parece pavoso; y de los que se
sienta a ver los juegos o los resultados en el periódico, cuando
empatamos o perdemos, arrugando la cara cuando leo “algo aprendimos
y avanzamos”. Con toda nuestra historia ya deberíamos ser los más
hábiles y sabios del mundo, en fútbol. Pero ganamos, joder.
¡Ganamos!
......
Festejarán
al flaco Marc Anthony, en los Latin American Music Awards y me parece
y se siente bien, dada su trayectoria musical, su don de gente (le
recuerdo con afecto por el dolor que mostró por lo de Celia Cruz),
porque es un gran cantante y es un latino exitoso, carajo. Nada más
que por eso ya cuenta. Cada vez que le veo sobre el escenario no
puedo evitar sonreír ante su figura delgada y pensar en su
matrimonio con esa batidora que parecía la Jennifer Lopez. También
le recuerdo por su “Vivir lo Nuestro”, cantado a dúo con esa
mujer de voz de diamante, dura y clara, la India. Que celebre y lo
disfrute. Me alegro por él. Por cierto, ¿qué fue de la vida de la
India? A Venezuela ya no sólo no llegan los nuevos discos, no viene
nadie a dar conciertos, sino que ni llegan las noticias.
......
Ronaldo,
Cristiano Ronaldo, llegó el lunes a los setecientos goles en su
carrera. ¡Setecientos! Se dice fácil y rápido, ¿verdad? Me alegro
por este muchachón; me agrada (mucho más antes) desde los tiempos
que parecía un fideo y lloraba con aquel sentimiento, abierto y
sincero, cuando eliminaban a su Portugal; por allaaaaá, en los
comienzos de su carrera. Mucha agua ha corrido bajo ese puente desde
entonces, pero se le sigue teniendo afecto. Soy de los que está
firmemente convencido de que su salida del Real Madrid fue un duro
golpe contra el fútbol español, ante el cual siempre nos sentábamos
expectantes a ver qué pasaría en un juego donde se enfrentaran el
luso y el argentino. O para comparar números. Parte de esa magia
desapareció. Cómo debió saber de bien ese gol, ¿eh?
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