CUOTA NECESARIA
Sonríe
confiado y complacido, la vida era buena para un macho alfa. Un buen
empleo, una buena casa en una buena zona y hermosas tardes de sol con
jóvenes vecinos casados que le miraban de manera confusa y excitada
cuando, burlón, les decía: Si, chico, ven con papá.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario