¿TODAVIA ARDE LA AMAZONIA?
¿Es
un delito grabar a compañeros de trabajo en el baño?
¡Claro!
En una estación policial gringa, en Long Beach, un ex agente se ha
convertido en reo de la justicia después de filmar, durante meses, a
sus compañeros masculinos de trabajo en el baño con un teléfono
celular. Los grababa usando los urinales o cambiándose de ropas, en
esos momentos cuando medio desnudo, un tipo habla con otros. ¡Contaba
con no menos de 100 videos sobre casi 70 colegas! Uno de los agentes,
policía al fin, notó la cámara del teléfono, esperó y atrapó al
hombre, Sergio Nieto, de 29 años de edad. Enfrentado a uno de esos
tribunales donde te sacan la verdad así no quieras, admitió esos
delitos y que también filmó a tipos en un gimnasio. Le condenaron a
6 años de prisión, a 5 más en libertad condicional, a mantenerse
alejado de esa estación policial y a tomar clases sobre compulsión
sexual. Con la amenaza de que si recae pueden darle 28 años de pena.
El juez, dictando sentencia, alegó que era un caso inquietante a
muchos niveles, pero lo más grave es el abuso de confianza. ¿Qué
tal? Ya uno imagina a la familia de Nieto durante el juicio, el papá
cubriéndose la cara con una mano, si es que fue. Y, sin embargo,
mirándolo de manera ligera, la vaina da hasta risa. Hay cosas que
pasan. Recuerdo una vez en el bachillerato a un muchacho que casi
roba el calzoncillo de otro. Definitivamente el sexo arrastra, aunque
hay que saber medirse o termina uno como este Sergio Nieto, todo
rayado.
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