Muchos
lo tenían a toque aunque no lo sabían...
-Por...
Por favor... detente, no sigas... ¡Ahhh!
-¿Detenerme?,
vamos, jefe, hace rato que su concha hace todo el trabajo, apretando
y chupando con ganas. -se burla sonriendo, recordando los días
cuando el otro pensaba que era todo un hombre.- Más bien me parece
que quiere que meta dos, o que lo llene yo, aquí mismo, sobre su
escritorio, con la foto de su señora y los niños allí, o que llame
a Zapata y Rodriguez, los dos tíos de Mantenimiento, para que
sigamos jugando a “¿adivina de quién es ese dedito en el
culito?”. Para comenzar, claro...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario